Antes de ir a ver una película, el primer gancho que nos tiene que convencer, cuáles peces ante un cebo, es el tráiler. Esta herramienta, tan importante como el comer para la industria cinematográfica, es el principal valor del márketing del séptimo arte que guarda en sí un estilo propio que debería tener su propio reconocimiento.
Claro está, han hecho el trabajo sucio de las películas, el de resumir en apenas dos minutos toda la trama sin destapar el pastel, generando sus propias narrativas, la síntesis, formas de llamar la atención y, cómo no, los clichés. Y aquí viene lo último. ¿Nos están tomando el pelo desde la otra punta del charco?
¿Qué cómo? ¿Es posible? Puede ser, si atendemos a que estamos contemplando como estos tráilers parecen venir con la misma estructura y son poco dados a dar una sorpresa o un giro. Un inicio con plano general, voces en off profundas con frases filosóficas o dramáticas, hasta el clímax que parece puntualizarse con alguna explosión o la banda sonora explotando los tímpanos.
Claro está que no todos son así. ¡Viva lo alternativo! Pero hay gente como RedLetterMedia que ha querido plasmar esas semejanzas y dar la voz de alarma, especialmente en los blockbusters. ¿Guardan parecido Jurassic World, Terminator: Génesis, Godzilla, Oblivion, Los vengadores, Guerra Mundial Z, Star Trek: En la oscuridad o Batman v Superman: El amanecer de la Justicia? Juzga por ti mismo.
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