martes, 23 de junio de 2015

Fallece en un accidente de avioneta el compositor James Horner, ganador del Oscar por 'Titanic'


El director de orquesta estadounidense James Horner, conocido por ser el compositor de bandas sonoras como Alien, Apolo 13, Braveheart, Titanic o Avatar, ha fallecido la pasada noche del lunes a los 61 años de edad tras estrellarse la avioneta que pilotaba, según avanzó por la mañana (hora peninsular) The Hollywood Reporter.

El suceso tuvo lugar en el área de Santa Bárbara (California), en torno a las 21.30 horas (hora local), cuando la avioneta personal de Horner, un modelo S-312 Tucano MK-1, se precipitó contra el suelo tras registrar un fallo en el motor. Los equipos de Bomberos se desplazaron inmediatamente hasta el lugar del siniestro, pero no pudieron encontrar supervivientes, y las causas del accidente se siguen investigando.

Su fallecimiento supone una notable pérdida para el mundo del séptimo arte, que pierde a uno de los iconos, junto a John Williams, Howard Shore o Hans Zimmer entre otros muchos, encargados de dar vida a las películas interpretando la trama al son de la música.

Horner ganó en 1998 sendos Oscar gracias a Titanic, de James Cameron, a Mejor canción original por My heart will go on, el tema cantado por Céline Dion; y el de Mejor música original. Además, obtuvo un total de 10 nominaciones a los Oscar, 3 a los BAFTA, 9 a los Globos de Oro (2 estatuillas por Titanic), otras 5 a los premios Satellite (de los que ganó 3) y 9 a los Saturn, donde consiguió dos premios, el último por su trabajo en Avatar.

Aunque quizá quedó "encasillado" por su participación en este filme, Horner tuvo una larga y dilatada carrera cinematográfica, siendo encargado de películas como Star Trek II: La ira de Khan (1982) El nombre de la rosa (1986), Alien: El regreso (1986), Willow (1988), El informe pelícano (1993), Leyendas de pasión (1994), La máscara del Zorro (1998), Una mente maravillosa (2001), Enemigo a las puertas (2001) o Troya (2004),

Sin duda, era reconocido por incluir en sus producciones un particular cliché que le hizo único y creó una marca de la casa conocido mundialmente como el "parabará", sus cuatro notas musicales que no dejaron en sonar en ningún filme de su firma, y que muchos seguidores del séptimo arte se encargaron de buscar y recopilar.

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