Las 'Bodas de sangre' de Lorca regresan al cine

Bodas de sangre, una de las obras teatrales de Federico García Lorca más reconocidas e importantes de su carrera literaria, volverá a representarse en la gran pantalla. En esta ocasión con el nombre de La novia, la adaptación libre dirigida por la cineasta Paula Ortiz, que debutó con De tu ventana a la mía, Premio Pilar Miró de la Seminci vallisoletana, y que protagonizan Inma Cuesta, Álex García y Asier Etxeandia.

"La novia es una gran historia de amor, Una de las tragedias más bellas del imaginario español, donde el paisaje hipnótico envuelve a unos personajes fascinantes, equiparables al Romeo y Julieta de la cultura anglosajona, dentro del universo mediterráneo", han asegurado desde la productora del filme.

La novia se ha rodado a caballo entre los Monegros aragoneses y la región turca de la Capadocia. Una combinación inusual que puede dar buen resultado. Junto al tridente protagonista estarán también Leticia Dolera, Ana Fernández, Luisa Gavasa y María Alfonsa Rosso.

La novia es una producción de Get in the Picture Productions, en asociación con Rec Films y con la turca Mantar Film, que cuenta, además, con la participación de TVE, Televisión de Aragón, del ICAA y de las Diputaciones Provinciales de Zaragoza y Huesca.

Con anterioridad, Bodas de sangre, escrita en 1931, había sido versionado tres veces en el cine. La primera fue una temprana versión, de nacionalidad argentina en 1938. Hacía menos de dos años del fusilamiento de Lorca cuando Edmundo Guibourg la llevaba a la pantalla con Margarita Xirgu y Pedro López Lagar. En 1977, se grabó otra versión de nacionalidad marroquí dirigida por Souheil Ben-Barka. Aunque la más reconocida es la versión musical que dirigió Carlos Saura, en 1981, a partir de un ballet de Antonio Gades.

Los acontecimientos trágicos y reales en los que se pudo basar Lorca para su obra sucedieron en el Cortijo del Fraile, lugar de rodaje de películas como El bueno, el feo y el malo o La muerte tenía un precio, en el municipio de Níjar (Almería), el 22 de julio de 1928. Lorca los conoció por la prensa, si bien es verdad que la periodista Carmen de Burgos escribió anteriormente un relato corto sobre el suceso, Puñal de claveles, que le pudo servir de inspiración.